G2G y APP en Perú: oportunidades y barreras
Un análisis de las oportunidades y desafíos para modernizar la infraestructura pública en el Perú
La infraestructura pública peruana atraviesa un momento decisivo. La creciente adopción de Contratos Gobierno a Gobierno (G2G) y Asociaciones Público-Privadas (APP) responde a la necesidad de ejecutar proyectos con mayores estándares de eficiencia, transparencia y predictibilidad. Estos modelos, consolidados en jurisdicciones como Reino Unido y Estados Unidos, ofrecen mecanismos avanzados de gestión contractual y distribución de riesgos que el esquema tradicional de obra pública ha demostrado no poder sostener de manera adecuada.
Este artículo examina, desde una perspectiva comparada y jurídica, las oportunidades y limitaciones reales que enfrenta el Perú al incorporar estas modalidades.
1. Razones estructurales para la expansión de los G2G y las APP
El modelo convencional de contratación ha mostrado limitaciones persistentes: expedientes rígidos, baja capacidad de gestión, supervisiones con alcance limitado y procesos que derivan en ampliaciones de plazo y controversias repetitivas. Frente a ello, los G2G y las APP introducen prácticas esenciales:
Asignación equilibrada de riesgos basada en contratos de referencia internacional (NEC4 en Reino Unido, FIDIC y AIA/ConsensusDocs en EE. UU.), los cuales privilegian la gestión temprana de riesgos y la claridad en las obligaciones.
Gestión contractual activa, sustentada en gobernanza, comunicación continua y toma de decisiones oportuna, elementos indispensables en proyectos de alta complejidad.
Estandarización técnica y uso progresivo de BIM, aspecto donde la jurisprudencia estadounidense y británica ha marcado criterios sobre responsabilidad, confiabilidad del modelo y niveles de desarrollo (LOD), anticipando escenarios que en el Perú recién se empiezan a discutir.
2. Oportunidades reales para el Estado y el sector privado
A. Mayor predictibilidad en plazo y costo
Los G2G ejecutados en el marco de la Reconstrucción con Cambios demostraron que la disciplina contractual inspirada en NEC —incluyendo early warnings, revisión continua de riesgos y contratos más colaborativos— reduce la incertidumbre. En las APP, la asignación de riesgos al privado y los esquemas DBFOM/DBFM permiten alinear incentivos hacia el desempeño real.
B. Transferencia de capacidades y fortalecimiento institucional
La intervención de PMOs internacionales ha elevado el estándar técnico en programación, procurement, gestión contractual y BIM. El desafío pendiente es consolidar ese conocimiento dentro de las entidades públicas una vez culminan dichos encargos.
C. Incremento en accountability y trazabilidad
Tanto las APP como los G2G incorporan mecanismos de verificación, hitos obligatorios y métricas de desempeño que disminuyen los espacios de discrecionalidad. Esto favorece la transparencia y la toma de decisiones basada en evidencia.
D. Impulso a la adopción de BIM con fines jurídicos y contractuales
Los criterios de tribunales en Reino Unido y EE. UU. respecto a la responsabilidad por modelos, coordinación digital y uso de BIM como documento contractual ofrecen una base para futuros desarrollos normativos peruanos.
3. Barreras que condicionan el éxito de estas modalidades
A. Capacidades institucionales insuficientes
La complejidad de los G2G y las APP exige equipos estatales con formación especializada en riesgos, gobernanza contractual y modelos colaborativos. Esta brecha es una de las más determinantes.
B. Marco normativo incipiente para BIM
Aunque existe un mandato de implementación progresiva, el Perú aún carece de reglas claras sobre interoperabilidad, asignación de responsabilidades, actualización de modelos federados y consecuencias legales de inconsistencias. Esta ausencia limitará la eficacia de cualquier esquema moderno de contratación.
C. Cultura administrativa adversa a la toma de decisiones
Una gestión pública que privilegia evitar riesgos personales —en lugar de administrar riesgos del proyecto— es incompatible con modelos colaborativos como NEC o con las obligaciones de desempeño en las APP. Países como Reino Unido enfrentaron esta misma problemática mediante claridad normativa, roles definidos y profesionalización permanente.
D. Inestabilidad política y rotación de funcionarios
La falta de continuidad en equipos directivos y técnicos afecta cualquier marco contractual. Ni el mejor esquema G2G ni la APP mejor estructurada puede sostenerse sin una administración profesionalizada y estable.
E. Sistema de resolución de disputas aún en consolidación
Aunque el arbitraje peruano ha avanzado, aún existe limitada especialización en controversias vinculadas a BIM, contratos colaborativos y modelos NEC/FIDIC. En contraste, EE. UU. y Reino Unido cuentan con precedentes que guían la responsabilidad por diseño, coordinación digital y deber de advertencia técnico.
4. Referentes internacionales que ofrecen lecciones útiles
Reino Unido: NEC4 como estándar de gestión moderna
NEC4 se centra en la colaboración, la gestión temprana y la prevención de disputas mediante mecanismos de comunicación continua. Su eficacia depende de la disciplina contractual, no solo de su adopción formal.
Estados Unidos: precisión contractual y responsabilidades definidas
Los contratos AIA y ConsensusDocs, así como el uso de FIDIC en determinados segmentos, establecen criterios rigurosos sobre propiedad intelectual del modelo BIM, estándares de cuidado profesional y coordinación. Estos elementos reducen ambigüedades y aumentan la certeza jurídica.
APP internacionales: predominio del desempeño sobre el formalismo
Canadá, Reino Unido y Australia han demostrado que los esquemas basados en KPIs y evaluaciones objetivas de desempeño generan infraestructura confiable y operativamente sostenible.
5. Conclusión: avanzar requiere más que adoptar modelos modernos
El Perú cuenta con una oportunidad significativa para consolidar proyectos de infraestructura bajo estándares internacionales. Sin embargo, la sola adopción de mecanismos G2G o APP no garantiza mejores resultados. Se requiere fortalecer capacidades, profesionalizar la gestión pública, estandarizar procesos técnicos —incluyendo BIM— y consolidar un marco jurídico coherente.
Solo mediante un ecosistema institucional robusto estos modelos podrán desplegar todo su potencial y convertirse en instrumentos regulares para desarrollar infraestructura de calidad, con previsibilidad, transparencia y eficiencia.